EL MEJOR NEGOCIO PARA CHIAPAS

Sin derribar montañas ni afectar la selva, por el contrario, rescatar muchas de las áreas que fueron desmontadas en el pasado, en las regiones Norte y Selva, se instrumenta un amplio programa para el cultivo del hule.

Su inclusión dentro del esquema de plantaciones comerciales forestales para poder acceder a los apoyos del programa Proárbol, es un aliciente para quienes se dedican a esa actividad y los que quieran entrarle.

Entre Veracruz, Oaxaca, Chiapas y Tabasco la producción solamente alcanza a cubrir el seis por ciento de la demanda nacional que alcanza las 80 mil toneladas anuales.

La industria del hule va en crecimiento, tomando en consideración que es el único sustituto del petróleo y ello trae consigo el mejoramiento de los precios que ya rebasan los 25 pesos el kilogramo y "no hay".

"Sin menospreciar a la palma, el hule, en estos momentos es el mejor negocio del mundo y Chiapas tiene un potencial en miles de hectáreas para su cultivo que debemos aprovechar", establece el presidente del Consejo Estatal de Productores y Cultivadores de Hule en Chiapas, Luis Rey Uscanga Uscanga.

En estas regiones existe un potencial superior a las 500 mil hectáreas para su establecimiento y actualmente solamente se cuenta con cuatro mil 800, de las cuales gran parte todavía está en desarrollo.

Ante ello, el gobierno del estado ya instaló cuatro viveros en donde producen 620 mil plantas que están listas para su entrega.

El objetivo de las autoridades es que en cuatro años se siembren 40 mil hectáreas, aunque se pretende que esa meta llegue a las cien mil.

Y es que el potencial es enorme y para ello los productores han firmado convenios con el INIFAP, el IFAT, la Secretaría del Campo, la Sagarpa y la Semarnat, para emprender talleres de capacitación a quienes se interesen porque "la finalidad también es recuperar los suelos deforestados y con alta pendiente".

"Ningún nuevo productor tiene permitido derribar montañas para sembrar hule. La determinación es cambiar el uso del suelo agrícola y de pastizales improductivos al de plantaciones comerciales e industriales sin afectar la selva y el bosque", establece el especialista.

Muchos ganaderos están viendo en el hule la oportunidad de reconvertirse en virtud a que les dejaría mayores ingresos, a pesar de que luego de la siembra las cosechas empiezan a los siete años, pero "con el apoyo del Proárbol, se puede salir adelante".

El hule es utilizado en un 70 por ciento para la elaboración de llantas, el cinco por ciento en suelas de zapatos y el resto en 40 mil productos diferentes, entre ellos materiales quirúrgicos y de salud.

Dedicado a esa actividad desde hace 32 años y recién retornado de La India en donde acudió a cursos y seminarios, así como a conocer los procesos de producción, Uscanga Uscanga, señala que México tiene un gran potencial pero es desaprovechado.

Señala que en esa nación solamente el estado de Kerala, tiene 650 mil hectáreas de hule y 300 investigadores, mientras en nuestro país hay tres especialistas y el cultivo es promovido hasta ahora en la administración de Sabines Guerrero, como una alternativa que ayudaría a la recuperación de macizos forestales.

En los municipios de Palenque, Benemérito de las Américas y Marqués de Comillas se encuentran ya establecidas algunas extensiones, muchas de ellas en producción, pero no se le da el tratamiento adecuado y se vende a intermediarios, incluso guatemaltecos que lo pasan hacia ese país.

Uscanga Uscanga muestra el laminado del hule y considera que es así como debe de producirse, en una mecánica sencilla que permite la calidad homogénea para obtener mejores precios.

Por ello, reconoce el respaldo que ha dado el gobierno del estado mediante la instalación de viveros para el establecimiento de nuevas plantaciones como respuesta a las solicitudes de productores que quieren reconvertir sus parcelas de ganadería intensiva y de cultivos tradicionales.

Precisa que el hule representa una de las alternativas, junto con la palma africana, para recuperar aquellas áreas que durante años han sido devastadas en las regiones selvática y norte de la entidad.



Viveros

El vivero de hule "Estación Lacandón" en el municipio de Palenque cuenta actualmente con 200 mil plantas, listas para ser distribuidas en cuanto empiece formalmente la temporada de lluvias, pero tiene 200 mil bolsas ya preparadas para "hacer más".

Pero en Nuevo Orizaba, Francisco Grajales y Nueva Unión, todas del municipio de Benemérito de las Américas, están instalados los otros con 215 mil, 107 mil y 98 mil plantas respectivamente.

Con todas ellas, en este año se pretenden sembrar más de mil hectáreas en este año.

El coordinador de los viveros, Miguel Nazuno Pérez, establece que desde hace tres años no se siembran nuevas plantaciones e incluso, lo último que se hizo fueron 50 hectáreas y de ahí se había abandonado.

Ahora existe una nueva dinámica y esta zona cuenta con un gran potencial que se tiene que aprovechar para el cultivo del hule, como una alternativa productiva, social, económica y ecológica, con la visión de rescatar las áreas devastadas y que actualmente permanecen prácticamente abandonadas.




GUTIERREZ - ISF - UNACHPQE

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